ORACION DE LA MAÑANA - EN QUE PROBLEMAS CAISTE Y NECESITAS SER RESCATADO

En la vida hay tres clases de hoyos en los cuales podemos caer y de los cuales solo Dios nos puede rescatar. El primer hoyo es el hoyo de las circunstancias: lo encontramos en el Salmo 7:15 que dice: Pozo ha cavado, y lo ha ahondado; Y en el hoyo que hizo caerá. Muchas veces en el hoyo que hemos caído somos nosotros mismos quienes los que lo hemos cavado. Fuimos nosotros mismos quienes creamos esa circunstancia, quienes dejamos esa puerta abierta, quienes mantuvimos esa relaciòn inadecuada e inconveniente, quienes tomamos malas decisiones, y finalmente las circunstancias se pusieron dificiles que se convirtieron en profundo hoyo del cual no podemos salir y es solo cuando estamos en crisis o en tragedia y al borde de la muerte. Que nos acordamos de de decir Dios rescatanos ahora de ese hueco en el que las circunstancias, o mis decisiones o mis indecisiones me han puesto, por favor sácame de aquí. Pero también hay situaciones como en la vida de Josè donde las circunstancias lo llevaron a estar metido en un pozo, fueron sus hermanos quienes lo echaron en ese pozo y luego lo vendieron como esclavo a Egipto, pero lo màs lindo es que Dios rescato a Josè y lo llevó a Egipto para que cumpliera el propòsito que el tenìa que era preservar la vida de sus generaciones. El Segundo hoyo es el hoyo de la desobediencia Muchas veces nuestra desobediencia a lo que Dios nos ha mandado nos lleva a estar en situaciones apretadas como le pasó a Jonás que por desobedecer a Dios terminó en el vientre de un gran pez. Tal vez Jonás desde el vientre de ese pez clamo a Dios pidiendo que lo rescatara de ese hoyo a donde su terquedad lo llevò, a donde su desobediencia a Dios lo llevó y finalmente Dios escuchó su clamor y lo rescató pero lo sacò no para que siguiera su camino y ya sino que lo dejó listo en la playa de Nínive para que cumpliera el propòsito para el cual lo tenìa preparado que era predicar a la gente de Nínive para que se arrepintieran. Recuerda Dios nos rescata del hoyo para que cumplamos el propòsito que tiene para nosotros. El tercer hoyo es el hoyo del propósito: muchas veces no logramos entender porque si estoy obedeciendo a Dios, él permite que caigamos en hoyos difíciles de salir, como Pablo y Silas en la cárcel de filipos, se encontraban en la mazmorra más profunda en el lugar donde llegaban las aguas negras, los desechos de la cárcel, un olor terrible, con los pies encadenados a un cepo, con ratas y cucarachas a su alrededor mordiendoles los pìes y en completa oscuridad. Pero lo màs importante es que en medio de ese hoyo en el que se encontraban tenían la paz de Dios que no depende de las circunstancias externas y en lugar de lamentarse comenzaron a adorar a Dios por medio de canciones y en medio de esas canciones también clamaron a Dios para que èl rescatará del hoyo sus vidas: Señor mira los cepos aprietan nuestras rodillas, nuestras espaldas han sido molidas a azotes, pero aquí desde este pozo profundo yo clamo a ti, para que tu rescates del hoyo nuestra vida. y finalmente Él lo hizo no sin antes cumplir su propósito que era acercar a Dios la vida del carcelero y su familia. Por eso hoy quiero invitarte a que clames desde el pozo en que te encuentres, quizà estas en el pozo de las circunstancias donde tu mismo poco a poco te fuiste metiendo, por ejemplo te endeudaste hasta el cuello y ahora no tienes como pagar, y si no pagas te van a embargar tu casa, tu coche, tu sueldo y ahora ya no tienes salida, haz caido en el pozo que tu mismo cavaste, O quizà como José estas metido en un hoyo en el que otros con mala intenciòn te metieron y hoy te encuentras en un pozo sin salida, metido en un problema grave y tu siendo inocente, O quizá como Jonas estas metido en un pozo donde tu desobediencia a Dios te ha llevado, Dios te ha llamado pero tu siempre has estado rehusandote a ese llamado y finalmente te encuentras metido en un hoyo profundo como Jonas en el vientre de ese pez.